Aunque el anuncio de Boris Johnson del pasado jueves 19, de reforzar el presupuesto de los próximos cuatro años para el área Defensa en unos 16.500 millones de libras esterlinas (unos 22.000 millones de dólares) sea para analistas internacionales sinónimo de exageración y vean en ellos un intento de elevar los bajos niveles de aceptación de su gobierno, la prensa europea y mundial publicó en cadena la información oficial del Reino Unido dando cuenta de su intensión de asignar una mayor inversión para el sector militar.
“He tomado esta decisión en medio de la pandemia porque la defensa del reino debe ser lo primero”, explicó el primer ministro, sobre todo porque “la situación internacional es más peligrosa y más intensamente competitiva que en cualquier otro momento desde la Guerra Fría, y el Reino Unido debe ser fiel a su historia y estar junto a sus aliados. Para lograr esto, necesitamos mejorar nuestras capacidades en todos los ámbitos”. Hecho que asoció como una oportunidad de transformar las Fuerzas Armadas, reforzar la influencia global, unir y nivelar el país, siendo pioneros en nuevas tecnologías “y defender a nuestra gente y nuestra forma de vida”.
Según las fuentes del Ejecutivo, la inversión militar creará “10.000 puestos de trabajo” por año, que incluye la creación de una nueva agencia dedicada a la Inteligencia Artificial, una Fuerza Cibernética Nacional y un nuevo “Comando Espacial”, cuyo primer objetivo será lanzar “nuestro primer cohete en el 2022”.
El ministro de Defensa, Ben Wallace, festejó el anuncio, indicando que asegura empleos y medios de vida en el Reino Unido, inversión en sus astilleros y en la industria aeroespacial.
El anuncio de Johnson se hizo a través de una videoconferencia porque se encuentra aislado tras haber estado en contacto con una persona que luego dio positivo de coronavirus, el mandatario conservador afirmó que el monto asignado es «suficiente» para afrontar estos nuevos desafíos. “Las Islas Malvinas y el peñón de Gibraltar aparecen entre las prioridades de la iniciativa”, descató el Diario La Prensa de Argentina.