El reclamo para incorporar a todos los veteranos había sido elevado por la llamada Confederación de Combatientes de Malvinas de la República Argentina en el que están representados grupos de la mayoría de las provincias. El proyecto de decreto tiene un alto contenido simbólico y no económico, ya que no representará cambios en el régimen de pensiones. Pero sí en la política inclusiva de civiles y militares y en los beneficios que a partir de su aprobación se consigan. Porque de hecho pone fin a la política de exclusión a todo lo que fuera de origen militar, que impuso el “reinado” en la Comisión del grupo de ex combatienes ultrakirchneristas, concretamente el CECIM, de la Plata.
Según sabe Clarín, este cambio por decreto fue conversado en los últimos meses con todos los grupos de combatientes que fueron llamados a dar su opinión y su propuesta -el CECIM lo rechazó- por el Secretario de Asuntos Políticos e Institucionales del Ministerio del Interior,Adrián Peréz y por su subsecretario, Julio Postiglioni. Los combatientes también mantuvieron reuniones con ell ministro Rogelio Frigerio a quien le reclamaron que la Comisión no pasara a Derechos Humanos como inicialmente se pensó.
En diálogo con Clarín, el presidente actual de la Confederación de Combatientes, el santafecino Rubén Rada, sentenció que el argumento del CECIM de excluir a todos los militares por asociarlos al concepto de “genocidas” se cae de maduro porque las mismas leyes de pensiones excluyeron siempre al personal de la fuerza con condenas por causas de lesa humanidad. Y que a lo largo de estos años, jóvenes que lucharon en Malvinas siendo jóvenes suboficiales “nada tuvieron que ver con la represión de la dictadura”. Agregó que lo ocurrido "ha sido una gran injusticia para ellos, que sólo sirvió par dividir a la comunidad de Malvinas”. Rada habló con este diario acompañado por otros miembros de la Confederación: Sergio Novarín, Omar Sánchez, Adrián López y Adolfo Schweighofer
Activo y respetado en los '80 y '90 por ser una de las agrupaciones que más luchó por los reclamos de los jóvenes conscriptos obligados a combatir en la guerra y por mucho tiempo olvidados, el CECIM se radicalizó al llegar al poder el gobierno K. Pero sobre todo, convirtió a Cristina Kirchner en una suerte de “madre” de todas sus batallas. Numerosos combatientes consultados por este diario ahora, se quejaron de que fuera hasta el cambio de gobierno el presidente de la Comisión, Ernesto Alonso, un ex titular del CECIM. Desde ahí se alzaron con espacios de control, como por ejemplo el del llamado Museo Malvinas.
Fue así como las otras agrupaciones señalan haber sido excluidas de toda decisión, habiendo grupos fuertes, organizados e igual de representativos que los de La Plata. Dentro del Gobierno, con aval de los ex combatientes quieren promover ahora una auditoría política y económica del manejo de la Comisión, donde no quedan registros ni recibos de ninguna actuación.
Hoy, de un padrón irregular, que ningún gobierno se animó a controlar después de haber sido sospechosamente inflado en los años 90' se calculan en unos 15000 los ex soldados y más de 4000 de origen militar,
Además de la redefinir lo que es un ex combatiente, el decreto de Macri iniciará un proceso por el cual las agrupaciones deberán elegir a un representante provincial. Habrá 24. Después estos quedarán agrupados en cinco regiones país, que designarán a uno para integrar la Comisión que quedará conformada así: cinco veteranos de las regiones (con la presidencia rotativa), un representante de los familiares, y diez representantes de los organismos públicos.